Las fotos estilo Ghibli se han convertido en una tendencia viral en redes sociales.
Miles de usuarios han compartido versiones caricaturizadas de sí mismos al estilo del legendario Studio Ghibli, generadas por herramientas de inteligencia artificial.
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Estos son los riesgos de hacer fotos estilo Ghibli
Uno de los principales riesgos de la inteligencia artificial generativa es la recopilación de información sin el consentimiento informado de los usuarios.
De acuerdo con Laura Enríquez Rodríguez, comisionada presidenta del Instituto de Transparencia de la Ciudad de México (Info CDMX), al usar aplicaciones para crear fotos estilo Ghibli con IA, se autoriza el acceso a metadatos, imágenes, ubicación y, en muchos casos, al historial del dispositivo.
“Estas plataformas pueden almacenar y utilizar en el futuro las imágenes, textos y audios que se suben para la transformación. Además, pueden compartir esos datos con proveedores, empresas afiliadas y terceros”.
Este tipo de prácticas puede comprometer seriamente la privacidad en IA y abrir la puerta a filtraciones o usos no autorizados.
Además, las condiciones de uso de algunas herramientas de inteligencia artificial como ChatGPT, Midjourney o apps móviles de edición no siempre explican claramente qué tipo de datos se recogen, por cuánto tiempo se almacenan o con qué propósito serán reutilizados.
Otro riesgo señalado por Info CDMX es que ningún sistema digital es completamente seguro.
Por lo tanto, incluso si las plataformas aseguran protección de datos, los contenidos pueden estar expuestos a ataques cibernéticos o ventas no autorizadas a terceros.
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Además, hay un impacto ambiental
Más allá del debate sobre privacidad, la generación masiva de imágenes mediante IA tiene implicaciones en el medio ambiente.
Según la UNAM, los centros de datos que procesan consultas de IA requieren grandes cantidades de agua para enfriar sus servidores.
Esto se suma al hecho de que una sola búsqueda en una plataforma de IA puede consumir hasta 10 veces más electricidad que una consulta estándar en Google.
Se estima que el consumo energético por la IA aumentará la demanda eléctrica global en un 15% para el año 2030, impulsado por el entrenamiento de modelos y el uso cotidiano de esta tecnología.
Esta cifra incluye tanto servicios comerciales como proyectos personales, entre ellos la creación de fotos estilo Ghibli con IA.
Aunque estas imágenes puedan parecer inofensivas, su producción involucra procesos de cálculo complejos que requieren servidores de alto rendimiento operando 24/7.
Esto implica un costo ambiental que, hasta el momento, no es perceptible para el usuario final.
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